Manejar con prisa bajo la lluvia puede ser fatal

Los accidentes de tránsito aumentan considerablemente durante la época de lluvias, en especial cuando los conductores priorizan la velocidad alta sobre la precaución.

Cada año, cientos de personas pierden la vida o sufren lesiones graves por no reducir la velocidad, no respetar las señales de tránsito o intentar rebasar de forma indebida ante condiciones adversas.

En lluvia, el campo visual se reduce drásticamente: los espejos y los cristales se empañan y la lluvia constante distorsiona lo que ves al frente.

A esto se suma el riesgo de que los frenos no respondan igual o que una llanta pierda adherencia. Cada segundo cuenta, y cada error puede ser fatal.

Conducir con precaución no es señal de debilidad, es muestra de inteligencia y respeto por la vida. Estas son algunas recomendaciones clave:

• Reduce la velocidad. Bajo la lluvia, el límite legal no siempre es el más seguro.

• No uses el celular. Una distracción mínima puede tener consecuencias trágicas.

• Respeta los semáforos y pasos peatonales. Aún más si hay poca visibilidad.

• Sé paciente. Si hay tráfico lento, no intentes rebasar por la derecha o subirte a la banqueta.

La prisa puede llevarte al hospital… o a algo peor.Conducir con prudencia no solo protege tu vida, también la de los demás.Tú decides cómo manejar. Hazlo con cabeza y corazón.